“Proteger la
naturaleza no es ir contra el progreso”
Todo país
logra su desarrollo en función de su calidad de conectividad en carreteras,
electricidad y telefonía, entre otros factores, si frecuentemente vivimos problemas
de árboles caídos en las carreteras causando muertos en los conductores y
vecinos de los corredores de carreteras y cortes de energía causadas por las
ramas de estos arboles en los tendimos eléctricos, creando problemas de
emergencia en las comunidades que exigen pronta solución a las distribuidoras
eléctricas, las cuales tienen que tener cuadrillas especializadas en conexión y
otras en podar los árboles grandes, que a la vez genera reclamos a través del
ministerio de medio ambiente
por deterioro ecológico ambiental, casos frecuentes en todo el país, similarmente en tendidos telefónicos, además sus enormes raíces destruyen las calzadas provocando accidentes fatales. Es aquí donde estos problemas son eficientemente solucionados sembrando arbustos apropiados en los corredores de carreteras; los cuales dan belleza, evitan la temible erosión, rompen las termales generadas por la fricción de las llantas con la superficie de la carretera, absorben el CO2 que generan los vehículos quedándose con el carbono y liberando el oxigeno que respiramos, generan un ambiente agradable por el paisaje evitando el estrés generador de fatales accidentes, también aprovechamos el paisaje que genera la biodiversidad tropical por sus espectaculares floración y follaje.
Estos arbustos
son perennifolios de atractiva floración, follaje, resistentes a las sequias y
a los temporales con gran capacidad de rebrotes y algunos de ellos producen
agradables frutos. De tal forma que cultivares de estas bondadosas especies
convertirían un actual problema en una solución potencializadora del turismo
local e internacional, fortaleciendo implícitamente la fauna especialmente de
aves, abejas y mariposas; elementos polinizadores que generan la mayoría de
frutas que consumimos, que en resumen convertir las carreteras en paseos
agradables de visitar, por ejemplo transitar entre unas 1,000 plantas de
Megakepasma, otras 1,000 plantas de Brunfelsia, otros 1,000 arbustos de Narcisos;
entre otras 50 especies apropiadas que el Vivero San Andrés esta preparando
para este megaproyecto en unión con actores visionarios, ONG y empresas con
alto contenido de Responsabilidad Social Empresarial (RSE)
Esperando
entrar en este promisorio proyecto a las alcaldías, comunidades, clubs de
servicios, Iglesias, Escuelas, Colegios, Gremiales, Reos en proceso de
confianza, Embajadas, entre otros actores de la calidad de vida de los
salvadoreños actuales y futuras generaciones. Todo esto apadrinado por los
medios de comunicación y el gobierno en turno. Aclarando que este proyecto es
un modelo de respuesta al impacto ambiental, el cual no es un producto
terminado, si no un seguimiento por mejorar la calidad de vida y hay espacio
para todos los salvadoreños y extranjeros sin distinción de sexo, religión,
edad, nivel académico, económico, ni político.
El Vivero San
Andrés esta en la disponibilidad de brindar un descuento de sus accesibles
precios y regalar la asesoría para cultivares de costa, media altura y estricta
altura en los corredores de las carreteras y en todo tipo de cultivares.
Ing. Mariano Villatoro