jueves, 12 de enero de 2012

EL CACAO UN TESORO OLVIDADO


La mayoría de salvadoreños, tienen el deseo de mejorar su calidad de vida y de sus futuras generaciones,  para lo cual permanece en una búsqueda continua de un mejor trabajo, de un mejor negocio, de una mejor inversión  o emigrar de El Salvador, entre otras actitudes propias del dinamismo social de salvadoreños positivos enmarcados en lo licito, viable y coherente; mientras que los negativos buscan los conflictos, lo ilicito y la violencia para liberar sus frustradas aspiraciones. Siendo el mayor valladar la incertidumbre de qué emprender que le garantice su deseo de realización. Una excelente opción es entrarle a la cultura del cacao en la que se involucran directamente los campesinos, propietarios de tierras, inversionistas, industriales, ecoturismo, economistas, restaurantes, innovadores en el área de alimentos, o sea que la cadena del cacao de los cultivares hasta llegar al consumidor final demanda la participación  de toda persona visionaria en las diferentes actividades socioeconómicas del país. Las innovadoras  tecnologías de procesamiento y conservación de alimentos, permiten en la actualidad generar  un universo envidiable de la industria del chocolate y derivados del cacao.

Las bondades del cultivar del cacao
-         Fortalece la seguridad alimentaría y la conservación ecológica.
-         Producción continua desde los dos o tres años de sembrados
-         Cultivar típicamente tropical, adaptado a todo tipo de suelo y topografía
-         Demanda mucho mayor que la oferta a nivel mundial y local
-         Generador de empleo en la cadena desde el cultivar hasta el consumidor en la cultura del chocolate
-         Fuente nutricional y medicinal ( mejora la fatiga, stress, debilidad cardiaca, la anemia, el apetito, digestión y estimula el sistema nervioso central ) 
-         Rentabilidad comprobada
-         No exige químicos, apropiado para la megatendencia de productos orgánicos.
-         Un prototipo de árbol para el ecoturismo, como ornamental por su follaje colorido y sus frutos, además es parte de la cultura precolombina como fuente alimenticia y referente monetario.
-         Fuente excelente de potasio para abonos orgánicos
-         Garantiza los beneficios ambientales como la conservación del agua al facilitar su infiltración al subsuelo, biodiversidad, evita la erosión, conservación y mejora del suelo, mitigación del cambio climático y del recalentamiento global.
-         Generador de divisas a toda prueba, pues tenemos tierra y mano de obra aptas para cultivares de cacao y actualmente El Salvador es el máximo comprador de cacao en Centro América
-         Permite el asocio con otros cultivares como el  madrecacao, la macadamia, el ojushte, el nogal, cocoteros, entre otros.     
-         El chocolate bebida ancestral en América y fuente de riqueza  en el primer mundo
-         El secado se realiza en  patios similares a los de beneficiar el café
-         Empresarios ingenieros como: Hershey Kohler, Lindt, Nestlé, Peter, Suchard y Tobler, emprendieron verdaderos imperios en función de la industrialización   del cacao.
-         Se recomienda sembrarlo a 3mX3m en terrenos con pendiente y a 4mX4m en terrenos planos.

En general el cacao es una excelente alternativa socioeconómica, ecológica y con garantía de tener éxito econométricamente con ingresos continuos  durante los doce meses del año y como evidencia la evolución de la industria del chocolate  desde que en América precolombina se consumía como una bebida o elixir para los dioses y como moneda de cambio (el contle, la carga, etc.) hasta que los españoles lo llevaron a Europa agregándole azúcar, luego los ingleses le agregaron leche, los suizos y norteamericanos afinaron el proceso  y le agregaron otros ingredientes, logrando un verdadero manjar de tal forma que el comprador y consumidor no se resista.

Toda ésta evolución del mercado del chocolate lo convirtió en una delicia para el paladar y a la vista; pero se aleja grandemente de las enormes propiedades medicinales y nutricional que posee el cacao al natural y debido a la enorme demanda y poca oferta a nivel mundial, el verdadero chocolate se ha sustituido por productos sintéticos simuladores del chocolate, únicamente en sabor y apariencia, pero sin la bondades medicinales y nutricionales del producto y además se pierde las bondades ambientales del árbol especialmente por ser tropical no se puede cultivar en otras regiones del planeta. La oportunidad ya la tenemos y sabemos, ahora comencemos.      

 
Ing. Mariano Villatoro